Almas solitarias

 

No debía haber enfermedades, pero sobre todo mentales.

Qué tristes y solos se deben sentir. Confundidos, desorientados en ese momento de crisis.

Sin que se entienda por lo que están pasando.

Nadie se puede poner en su piel, solo ellos.

Almas solitarias en busca de la verdad.
Parias de la sociedad.

Confundidos desorientados en esos momentos de crisis, pero cuando pasa, funcionan como los demás.

Cuando te ves ahí, en su piel, te desinhibes y no te importa nada ni nadie, solo hacer tú voluntad.

Vivimos en una sociedad global y somos pese a lo que nos pese, a las almas solitarias, seres sociales y tenemos que convivir con los "normales" y eso cuesta.

Cuesta la misma vida,  tenemos que serenarnos, admitir la ayuda que nos dan.

Las almas solitarias,  somos muy sensibles, no sabemos por qué nos pasan las cosas, qué a los demás molestan.

No lo hacemos para incordiar, nosotros no queremos estar en esta situación.

Estamos en la búsqueda de nuestro interior, solo queremos entender el mundo, por qué somos diferentes y no comprendemos éste mundo que va tan rápido.

Nosotros llevamos otro ritmo y necesitamos un lugar donde nos comprendan, donde nos den serenidad, pero no a base de pastillas que nos atontan y embotan la mente, sino un sitio donde haya naturaleza, bosques donde podamos coger oxígeno, de plantas, parques, mucho sitios verdes donde mirar el cielo y respirar aire puro.

Nos están envenenando, no con pastillas, que los médicos hacen lo que pueden y cada vez la medicina avanza más y las pastillas son más eficaces y sofisticadas.

Pero no queremos pastillas, queremos naturaleza, donde respirar, pintar, escribir, volar, montar a caballo, bucear, sentir, pero tenemos otro ritmo y tienen que respetar este ritmo.

Las prisas, los ruidos fuertes, el correr de la sociedad, nos aturde y molesta.

Ellos a nosotros, no al revés, ya es hora, que se alce la voz, de las almas solitarias, de los enfermos mentales, no queremos estar enfermos, la sociedad nos pone enferma.

Esta sociedad globalizada llena de ruido y prisa, donde no hay piedad, solo personas ignorantes llenas de miedo y prejuicios. 

Desde aquí, desde mi pequeño rincón del alma, alzo la voz y digo, ¡¡basta ya!!

Ayúdennos, respetemos a estas personas, que sólo piden vivir, amar. Sienten mucho más que los demás. Y sólo buscan su lugar en la sociedad, trabajar como los demás, pero a su ritmo.

Yo los entiendo y respeto, tengo amigos, familia y a ellos van mis palabras.

Trabajo para ellos, y en mi humilde rincón del alma tenéis un sitio para expresaros
Tanto familia, como ellos mismos.

No estáis solos. Abramos las fronteras de nuestra mente, Seamos una única voz, todos unidos por ellos.