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| Acuarela Atardecer en los Miradores. |
Y aquí estoy confinada
Nunca esperé verme tan agusto
Y feliz en mi casa
Nadie comprenderá porque estoy así
de bien y es que no necesito nada
para ser feliz, solo mi casa, la música
y mis pinturas, mis libros, escribir.
Nunca esperé verme en éste trance
en que no necesitara de nadie
para ser feliz.
A lo mejor suena mal y egoísta
pero no necesito de nadie,
Solo del que me suministra las pinturas,
los libros, la comida, el cartero.
Y la voz de mi madre al otro lado
del teléfono.
Y soy feliz en mi confinamiento.
Pintando, leyendo, escribiendo,
y que no falte la música,
que me une a la naturaleza,
ver un atardecer, el firmamento,
que me sustenta y equilibra,
por medio de las ondas.
No necesito más.
Solo saberte al otro lado
para después en el reencuentro
de familiares y amigos
que ahora estamos a base de pantallas
y teléfono.
No necesito de nada más,
salvo de ti,
el saberte al otro lado
el saberte que estás ahí.
Vida, equilibrio, mente, gente.
Nos veremos fuera y respirar
que la atmósfera limpia se regenerará
gracias a este impasse.
